



Lavar y secar bien los pimientos. Colocarlos en la bandeja de horno untados de aceite a unos 280 grados. Iremos dando la vuelta a medida que veamos que van asandose.
Una vez asados, sacamos la bandeja del horno y tapamos bien con papel de periódico (esto es para que los pimientos suden y luego se pelan con facilidad), hasta que estén frios.
Pelar y hacer tiras con las manos.
En una sartén ponemos ajo fileteado y los pimientos, rehogamos unos minutos y añadimos 1/2 copita de whisky y 1/2 de Pedro Ximenez. Dejamos que reduzca. Añadimos un poco de sal y 1/2 vaso de agua. Dejar a fuego lento 10 ó 15 minutos.
Ya están listos para usar en multitud de platos (ensaladas, tostas, acompañamiento).