1,200 de tomates pera
600 de azúcar
1 limón, canela en rama.
Hace muchísimos años, cuando nosotros al menos, no conociamos la mermelada de tomate, la descubrimos en casa de unos amigos nuestros. Encontramos que tenía un sabor un tanto peculiar... y nos encantaba tomarla en aquellos desayunos que se alargaban con agradables tertulias.
Me decían que era muy fácil hacerla, así que le pedí la receta y desde entonces la tengo.
Esta es la receta de CC.

Pelar los tomates (ahora no hace falta escaldarlos, como decía la receta de CC), venden unos pelatomates que facilitan el trabajo).
Pasar el zumo y las pepitas por batidora y añadir el resto de la carne del tomate.
Añadimos el zumo del limón y su corteza cortada en juliana muy finita, la rama de canela, y un vaso de los de vino de azúcar. Lo penemos a cocer durante media hora. Retiraramos y resevamos a tempeartura ambiente hasta el día siguiente.
Pasado el tiempo de reposo, añadimos el resto del azúcar en frío y cocemos durante otra media hora aproximadamente.
Introducimos en tarros, previamente esterilizados,cuando la mermelada caliente, cerramos el tarro y los ponemos boca abajo y dejamos así hasta que se enfríe. De esta forma conseguimos que se haga el vacío.
El etiquetado en las conservas es importante ya que tenemos referencia de la fecha de elaboración de la misma.
